La marca Begastri.

Hola a todos. Me ha costado bastante volver a animarme a escribir en este blog, no son buenos días para mi y cuesta rehacerse a la rutina, en alguna parte estúpida de mi cabeza siento como si el volver a hacer todas las cosas cotidianas de mi vida fuera una manera de olvidar más a mi madre, de dejarla atrás, de pasar una página que aún no quiero pasar. Pero hasta yo sé que haga lo que haga nada va a cambiar. Si me apetece partirme de risa, lo hago, si me apetece darme cabezazos contra una pared, pues también, nada de lo que haga te devuelve a un ser querido, solo puedes explotar de mil maneras.
Hoy me apetece hablar de lo que he titulado como la marca Begastri. Estos días he tenido la oportunidad de recibir muchisimas visitas de gente del baloncesto, todos han venido a acompañarme y todos han querido desviar las conversaciones hacia otros focos que no fueran hablar de la desgracia que ha sufrido mi familia, por ello he hablado y hablado de baloncesto con muchos amigos. Me ha quedado una impresión muy clara al respecto de mi club, y es que tiene mucho más prestigio y nombre fuera que aquí. Aquí me da la impresión que sigue siendo ese club de amiguetes que fundamos en el año 2.000 porque no nos dejaban actuar en el CB Cehegín, no nos dejaban tratar de crecer y llevar el club hasta las ligas nacionales, nos decían que eso eran sueños irrealizables y que calladitos estábamos mejor. Sigue siendo el equipo que se montó de la locura de cuatro tipejos que cuando se cansen y se vengan abajo dejaran la casa tan vacía como cuando empezaron. Y puede que sea así.
Sin embargo fuera de aquí, y cuanto más lejos mejor, nos ven de otro modo. Begastri ha llegado un punto que es sinónimo de cierto éxito, tenemos un prestigio y eso se nota. Cuando tú llamas a un jugador para proponerle que venga a jugar a Cehegín ahora te podrá decir que sí o que no, depende de sus circunstancias, pero todos se sienten alagados. Antes a algunos hasta le entraba la risa. Han sido muchos años consiguiendo ascensos, desde segunda autonómica hasta ascender 3 veces a EBA. Nuestro pabellón ha seguido imperturbable a esos éxitos, sigue viniendo la misma gente o incluso menos cada año, seguimos teniendo el mismo apoyo de nuestro pueblo o incluso menos cada año. Sin embargo, cada uno de esos logros ha ido engrandeciendo más nuestra imagen fuera de aquí. En los últimos partidos de esta temporada, cuando ya eramos campeones matemáticamente y equipo ascendido a EBA he sentido el respeto y admiración de los equipos contra los que hemos jugado. En Benidorm tuvieron palabras muy bonitas para nuestro equipo, «Enhorabuena Sergio, otro año quedando campeón incontestable y cumpliendo objetivos», me dijeron. El entrenador de Lucentum de Alicante me comentó que nuestro trabajo había sido espectacular todo el año y que era un honor poder terminar la liga en nuestra pista. En Calpe en la penúltima jornada nos dijeron palabras parecidas. Incluso en nuestra región, en la capital del reino, parece que nuestra imagen también está cambiando para mejor. Después de muchos años, primero de vacilarnos desde allí, después de desconfianza absoluta ante el proyecto UCAM que se nos asoció, y luego de enterrarnos varias veces por locos y temerarios, parece que la tendencia ha variado y ahora se nos mira con un poquito más de buen juicio.
La marca Begastri está creciendo, siempre lo ha estado, pero ahora la gente ha comenzado a querer consumirla. Será una pena que después de haber andado lo más duro, después de haber salvado la desconfianza de tantos, después de salvar los peldaños más complicados y cuando la montaña se vuelve un poco más llevadera tengamos que parar, dejarlo todo a un lado y dedicarnos a tomarnos un aperitivo en cualquier terraza mientras la conversación comienza con un «recuerdas cuando……».
Antes de terminar quería comentar un par de cosas. Primero desearle mucha suerte a Edu Sánchez en su aventura en el Campus de José Manuel Calderon. Es un honor que te encuentres ante esa oportunidad y espero que lo sepas hacer con la naturalidad con la que has afrontado todos los retos de tu vida que te has ganado con tu esfuerzo y tu ética de trabajo. Suerte. Por último decir que esta semana han terminado tanto la liga ACB como la NBA y yo hice mis apuestas. Acerté el Madrid, y fallé con Miami. Aposté por San Antonio y anduve cerca, pero Lebron desequilibró el séptimo partido. San Antonio regaló el anillo en los últimos segundos del sexto partido, y era de sobra conocido que en el séptimo no tendrían opciones. El Madrid se impuso con menos claridad de la que yo esperaba, pero es que el barsa tiene muchos cojones, da igual que se le vayan cayendo las figuras por el camino, ellos siguen siendo competitivos. Basta vestir a cinco inútiles con la equipación del Barcelona para ver un partido competido, son aburridos por cansinos, pero se agradece. Aún así este Madrid era muy superior y lo va a ser varios años a no ser que el señor Creus acierte de pleno este verano, y no lo tiene fácil porque el mercado no está muy fresco.
Me despido ya, y lo hago con una canción del mejor disco de lo que llevamos de 2013. Esto es Editors, a ton of love, espero que alguien lo sepa apreciar.

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