Desde las alas que el viento transporta hasta el cobijo del hombre.

Hola a todos, desde que no nos vemos, desde que no llamo aquí a las cosas por su nombre, ha pasado ya mucho tiempo. Yo he pasado por cambios y transformaciones, he pasado por un divorcio, y por el duro sacrificio que supone dejar de estar con mis dos hijos la mitad de los días en virtud de esa custodia compartida que tantos y tantos de vosotros puede que estéis catando. Yo, que por vocación siempre he querido ser «Padre», por encima de cualquier cosa, ahora me veo privado de mis hijos muchos días, y eso es complicado de asumir. Sentirlos lejos, acostarme y que ellos no estén hacia dentro de la puerta de mi hogar, sino en otro sitio, es devastador a veces. Pero he descubierto, en mi afán por ver el mundo siempre desde un prisma positivo, que tiene su lado bueno. Ahora cada viernes en el que los cojo para comenzar la semana con ellos la ilusión palpita fuerte en mi pecho, cada rato lo absorbo más, todo tiene más calidad, nos abrazamos, nos amamos, nos comprendemos más y, sobre todo, y esto es algo que antes no me pasaba, no existe pereza ni desidia para con sus cosas, soy activo, priman por encima de mis vagancias, de mis apetencias de adulto, en definitiva, he perdido cantidad de horas pero siento que sin duda las horas han ganado calidad. Calidad de energía, de vibración positiva, de ilusión y de complicidad.

Gracias por siempre a mi pareja, por enseñarme a quererme y valorarme, por hacerme entender que el corazón puede ser tan grande como la intención que lo mueva. Por andar este camino de puzles y verjas que saltar. Por merecer un lugar mejor para con uno mismo. Hacía mucho tiempo que no tenía ganas de vivir, no digo que antes yo hablara de querer morirme, no voy por ahí, hablo de ganas de hacer cosas, de que cada día sea mejor que el anterior, ganas de enjovenecer para comerle camino a la vida e invertir en ilusión. Sin duda, amantes del baloncesto que leéis esto, sin duda, si me diesen ahora mismo un cuerpo de 20 años lo usaría para jugar a baloncesto, para entorchar esa llama del deporte y su fusión con tanta gente buena que se mueve en él. Pero lo usaría también para dar a los demás todo lo mejor de mi y dejarme recibir también mucho de eso. Lo que quiero intentar exponer es que hace un tiempo, en mi vida rutinaria yo tenía una sensación de que ya había hecho prácticamente todo lo que quería haber hecho y que ya estaba en mi lugar y más feliz o menos ya tan solo quedaba un dulce dejarme llevar, como ese coche al que dejas de pisar el acelerador cuando ves el semáforo en rojo unos metros delante tuyo. Ahora, sin embargo, siento que me faltan días en el año para todos los planes que quiero hacer, y eso, se lleven a cabo o no, también da vida. Y es la lección que quiero que cojas, amado lector fiel a mis chorradas, si te estoy abriendo parte de mi coraza hoy aquí es para decirte que valores cada día, no te dejes llevar, excítate y piensa que siempre estás a tiempo de un montón de opciones vitales.

Redúcete hasta que importes tanto como cualquier desconocido de la calle y luego haz por vivir de nuevo.

Ya hablo de baloncesto va, nos queda una jornada para terminar la primera fase y vamos a concluir lideres de nuestro grupo, eso no es mucho la verdad, en realidad no supone nada, pero es una satisfacción y un primer objetivo de la temporada cubierto. Pasaremos a la segunda fase con un registro de 3 victorias y 1 derrota si es Cartagena quien se mete, o pasaremos con 4 victorias y 0 derrotas si quien se mete es Santo Ángel, se va a dirimir en unos días y sea de una manera o de otra, el objetivo siguiente es conseguir lugar en la final a cuatro del 19-20 de junio quedando entre los 4 primeros de esos 6 equipos que compondremos la segunda fase. Este año los progresos como equipo se ven más lentamente, por varios motivos, el primero de ellos son los problemas para entrenar, el segundo son los parones y reanudaciones que hemos ido teniendo, y el tercero, bajo mi punto de vista, es que la liga está muy dispar entre los equipos, somos un batiburrillo de mezclas de generaciones y los equipos no tienen un perfil típico de esta competición, así te puedes tirar un partido jugando ante un equipo con unas características de correr, presionar, defender individual, y al siguiente día te enfrentas con un equipo de veteranos en zona, que quieren lentitud, exasperarte, y luego unos jóvenes sin cabeza, etc…, con lo que cada día juegas a una cosa distinta y cuesta mucho crecer en el trabajo de entre semana.

Este domingo vamos a jugar a las 10 de la mañana ante el Real Murcia, esperamos ser capaces de jugar bien y seguir creciendo, pero después nos vamos de comida de equipo. Hace mucho tiempo que no participo de una, entre dejarme yo el entrenar, la pandemia, el divorcio y todos los cambios de mi vida me había sido imposible disfrutar de un rato así. Espero que estemos todos y lo pasemos de maravilla, sin duda, merecemos un día así.

Un hombre abrió las alas, en una esquina de altura, buscaba el frío en su cara, el aliento del viento colándose por su cuerpo. Nunca supo que buscaba esa noche. Ahora siente el cobijo que entonces reclamaba, ahora sabe que la energía ni se crea ni se destruye, se encuentra. Perdón por no estar ese día en las coordenadas adecuadas.

Esto es Time is disguise de kings of leon.

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